El correo electrónico que la Deutsche Bahn (RENFE alemán) me manda lleva como dirección noreply.kundendialog@bahn.de. Por un lado, buen rollito
kundendialog (diálogo con el cliente) y por el otro
noreply (no nos respondas). Osea, yo te PETO a publicidad encubierta llamándolo amablemente pero no nos des el cognazo respondiendo. Propongo, como Calamaro, honestidad brutal. Llamémoslo
telacuelo.tururú@bahn.de.
El alemán, supongo que como todos los idiomas, tiene conceptos intraducibles y fórmulas exclusivas para decir algunas cosas. Aparte de la jerga burocrática (
Hiermit, Aufgrund, Gegen Vorlage, Desweiteren...), hay palabras típicamente alemanas como
kuscheln, knapp, Vollständigkeit o, mi favorita
Bezirksschornsteinfegermeister (y esta la vi escrita en el portal de una casa, no me la he inventado). Cuidado que aparte de hacer palabras largas, también es útil para lo contrario. Hace poco me encontré con un buen titular de periódico. Sonoro, cortante y rítmico, era casi un verso:
POST CHEF WEG!Los italianos no tienen una palabra para
disfrutar (inglés
enjoy, alemán
genießen,
sich amüsieren...como se quiera decir, vaya). Te las tienes que arreglar con mezclas de
divertirse, gozar y
aprovechar. Parece una chorrada, pero en ese país que parece pensado para disfrutarlo, luego es complicado decirlo.
Y las ventanas. Ayer hablamos un poquito de ventanas, y de por qué los cuadros con ventanas gustan. De éste de
Dalí, y de cómo se parece a uno de otro pintor romántico (
como mi desayuno) alemán,
Caspar David Friedrich. Como también me dijeron que sin fotos no vamos a ningún sitio, pues aquí una foto de mi primera ventana alemana (Berlín, invierno 2004/2005), con mi primera nevada. Ay, la nieve!